lunes, 29 de abril de 2013

Las cosas cambian.

Jugaste tanto conmigo y llegué a quererte tanto que me cuesta creer que todo esto sea verdad. Solo me utilizaste para no estar solo y yo estuve siempre junto a ti como una tonta. Te di tantas cosas y me quede sin nada, al final resultó verdad todo a lo que un día le tuve miedo. Tenía miedo de perderte, de que te alejaras de mí, decías que no, pero cambiaron tanto las cosas. Me siento como una estúpida desde aquel día, te lo di todo y me quede sola y con las manos vacías. Dime que perdías junto a mí, ¿por qué te fuiste de mi lado si junto a mí tú volviste a sonreír? ¿Qué no podías vivir sin mi? Já, eso quedó en el aire. Pasaste de ser todo en mi vida a no ser nadie. Ya no me importa lo que digas, me juraste tantas cosas que resultaron mentiras. Me utilizaste, te equivocaste tanto conmigo que todavía no sé porque contigo me porté bien. Dijiste que era para siempre, pero ya no estás hoy. Y pensar que yo por ti me convertí en quien soy. Encontraré a alguien que sí me sepa valorar, no sé si lo que siento es falso, porque me enseñaste amar. Me juraste tantas verdades y yo creyéndote. Si algún día quieres volver, ya no estaré esperándote.

miércoles, 24 de abril de 2013

No sé que es, pero me encanta.

Y es entonces cuando te das cuenta de que todo empezó antes de lo que pensabas. Que con la primera sonrisa, la primera mirada, con el primer abrazo, ya sabías que iba a ser alguien importante para ti, lo que pasa es que no querías darte cuenta, no lo querías aceptar, hasta que llegó ese momento, el momento más esperado para los dos, el primer beso. Ese beso que lo cambió todo, pasamos de ser dos simples amigos a ser algo más. No sabíamos que era, pero había algo entre nosotros. Llámalo química, física, atracción  o simplemente llámalo X. Van pasando los años y aunque ya no estemos juntos, sigue existiendo ese algo entre nosotros. Después de dos años seguimos sin saber muy bien que es, pero cada vez que nos vemos, cada vez que estamos juntos, cada vez que nos miramos, sigue siendo como la primera vez.

lunes, 22 de abril de 2013

No puedo más, estoy harta.

Estoy harta de hablar y que nadie me escuche.
Estoy harta de que siempre me echen la culpa de todo.
Estoy harta de no gustarme a mi misma.
Estoy harta de que mi única forma de desahogo sea destrozándome los nudillos contra la pared al sentir que nadie me escucha. 
Estoy harta de callarme y guardarme todo lo que siento por culpa del miedo o la vergüenza.
Estoy harta de ser siempre la gilipollas que dice que si, la que está siempre para todo haga falta o no
y en cuanto digo que no, la culpa es solo para mi. 
Estoy harta de que me hagan sentir culpable al decir que no quiero hacer algo.
Estoy harta de decir algo y que me digan "No es lo mismo" o "Pues lo mío es peor porque..."
Estoy harta de que me digan que diga lo que pienso y que si lo digo me digan que soy una quejica. 
Estoy harta de sentir que sobro en todas partes. 
Estoy harta de sentir que nadie me quiere. 
Estoy harta de sentirme como una mierda. 
Estoy harta de llorar todas las putas noches y tener que sacar una sonrisa al día siguiente para no preocupar a nadie. No por nada, si no porque no me gusta ir de víctima.
Estoy harta de que me tomen el pelo y me manipulen como les da la gana. 
Estoy harta de ser la que daría la vida por muchas personas que no serían capaces de hacer una mierda por mi. 
Estoy harta de ser la que al final parece tonta de lo buena que soy.
Estoy harta de que mis padres se pasen el día peleándose y me metan a mi por el medio. 
Estoy harta de todo, pero sobretodo estoy harta de que nadie se de cuenta. Y es entonces cuando empiezo a estar borde y lo pago con las personas menos indicadas. Pero es así, tengo demasiada rabia acumulada, me callo demasiadas cosas y el día que explote no se va a salvar nadie.

sábado, 6 de abril de 2013

Le odio porque le quiero.

Le odio, le odio muchísimo  no os hacéis una idea de lo mucho que le odio. Le odio por no estar conmigo. Le odio por no hablarme de la misma manera que lo hace con ella. Le odio por no darme los buenos días ni las buenas noches de esa forma tan especial. Le odio por lo que me dice solo para conseguir lo que él quiere. Le odio por buscarme cuando no tiene a nadie. Le odio por todos los momentos buenos y malos que hemos pasado juntos. Le odio por no poder parar de pensar en él. Le odio por cada lágrima que ha caído por mi cara por su culpa. Le odio por no quererme, bueno no, en realidad me odio a mi misma por quererle tanto.

jueves, 4 de abril de 2013

Hopelessly devoted to you.

Sé que el mio no es el primer corazón que rompes, ni mis ojos los primeros en llorar. No soy la primera en saber que no te podré olvidar. Sé que soy una tonta dispuesta a esperarte sentada. Pero ¿no te das cuenta? No puedo hacer otra cosa, estoy desesperadamente enamorada de ti. No tengo lugar donde esconderme desde que rechazaste mi amor. Estoy perdiendo la cabeza. Mis amigas dicen que soy una tonta y que lo deje. Mi corazón dice que no te deje ir, que aguante hasta el final y eso es lo que pienso hacer.

Siempre igual.

Y cuando por fin encuentro a alguien que es capaz de hacerme sonreir, solo tengo ganas de llorar.
Que ¿por qué? Pues porque ese alguien no eres tú.

Cada uno lo entendió de una manera.

Estábamos en mi portal de pie y decidimos sentarnos, luego nos tumbamos y yo me puse encima suya, después dimos una vuelta y él acabó encima mía, no encontrábamos la posición adecuada, hasta que me senté apoyándome en una esquina que hacía la pared y él se puso entre mis piernas. Estuvimos un rato en silencio hasta que él decidió hablar.
- ¿Cómo hemos acabado de esta manera? - Me preguntó él.
+ No lo sé - Le respondí.
Él me lo preguntó refiriéndose a la forma en la que estábamos sentados después de haber dado tantas vueltas, lo que él no sabía era que mi repuesta iba más allá de eso, yo le respondí refiriéndome a como habíamos acabado siendo unos completos extraños después de todo lo que habíamos pasado juntos.